Conscientes de la importancia de reducir la dependencia de energías no renovables, Rotoplas implementa proyectos para abastecer a sus plantas de energía renovable. |
Extrusión, molienda, inyección y rotomoldeo son los cuatro procesos industriales que utilizamos en Rotoplas para fabricar las soluciones de agua que llevamos a familias, escuelas, comunidades y empresas en los 14 países donde operamos. Dichos procesos requieren energía para llevarse a cabo, principalmente de Gas Natural o Gas LP y electricidad. Es de esta manera como aseguramos la operación de las máquinas instaladas en nuestras 21 plantas.
Durante 2016, la electricidad fue la segunda fuente de energía más utilizada en nuestras operaciones, representando casi 25% de nuestro consumo energético, que equivale a 37.4 millones de kWh. Dicho consumo emitió 14 mil toneladas de dióxido de carbono equivalente (CO2E) durante dicho año.
Reconociendo la importancia del consumo y eficiencia energética, así como la necesidad de transitar hacia esquemas energéticos menos agresivos con el medio ambiente, en Grupo Rotoplas hemos implementado diferentes alternativas en nuestras plantas y centros de trabajo con el propósito de progresar en el uso de fuentes renovables de energía que alimenten nuestros procesos de trabajo.
A través de esquemas de compra y producción de energía proveniente de fuentes limpias como la solar y eólica, en Rotoplas hemos logrado que el 86% de la electricidad que utilizamos en nuestros procesos, sea obtenida del aprovechamiento de fuentes renovables. Dicho indicador ha mejorado con el paso del tiempo, ayudándonos a disminuir nuestras emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI). En este proceso de mejora continua, nuestro equipo de Cadena de Suministro, Compras, Operaciones y el personal de las plantas ha sido fundamental para alcanzar resultados positivos.
Resultado de dicho enfoque es que algunas de nuestras plantas más importantes en México se abastecen, casi en su totalidad, de electricidad proveniente de fuentes limpias. Tal es el caso de nuestra planta en Monterrey, Nuevo León; la planta en Lerma, Estado de México y nuestra fábrica ubicada en León, Guanajuato. Dicho enfoque genera beneficios no sólo ambientales sino también económicos.
Esta iniciativa está identificada en el segundo foco de nuestro Modelo de Sustentabilidad: Innovación Colaborativa con Sentido.
Te invitamos a conocer este y otros avances en sustentabilidad en nuestro Informe Anual Integrado 2016.